En desarrollo de la operación ‘Esparta’ la Policía Nacional, en coordinación con la Fiscalía General de la Nación, logró un nuevo e importante resultado contra el ELN, tras la captura en Cali de Ramiro Antonio Pallares Toro, alias ‘Pichón’, importante cabecilla del ‘Frente de Guerra Nororiental’ que delinque especialmente en la región del Catatumbo y que tiene dentro de sus objetivos principales atacar a la Fuerza Pública.
Uno de los hechos atribuidos a este cabecilla de la ‘Compañía Félix’ del grupo armado fue el asalto a un helicóptero de una reconocida empresa de transporte valores en enero de 2019 en Hacarí (Norte de Santander), donde fueron hurtados 1.700 millones de pesos y secuestrados los tres tripulantes.
En el mencionado municipio, así como en Sardinata, Tibú, San Calixto y La Playa, lideraba por orden de alias ‘Wilkin’ -segundo cabecilla del Frente de Guerra Nororientalconfrontaciones contra el grupo armado organizado (GAO) ‘Los Pelusos’ y grupos armados organizados residuales (GAO-r), con el fin de intentar un control territorial para el desarrollo de actividades criminales como el narcotráfico.
Al mismo tiempo, coordinaba la consecución de elementos bélicos y logísticos para el mencionado frente del ELN con enlaces en distintos puntos del país, como el Valle del Cauca, y presuntamente ordenaba el cobro de extorsiones.
Alias ‘Pichón’ contaba con una trayectoria criminal de más de 12 años en el ELN. Antes de asumir el control de la ‘Compañía Félix’ fue uno de los cabecillas de la ‘Compañía Caribe del Área Provincia’. Adicionalmente, era considerado como experto en el manejo de explosivos.
Pallares Toro o ‘Pichón’ controlaba directamente las comisiones armadas al mando de alias ‘John Breyner’ y alias ‘John Barbas’, segundo y tercero en la línea de la ‘Compañía Félix’, quienes tienen ubicados sus centros de coordinaciones criminales en zona rural del municipio de Convención.
En contra de ‘Pichón’ existía una orden de captura por los delitos de concierto para delinquir agravado, terrorismo, fabricación o porte de estupefacientes y tráfico, fabricación o porte de armas de fuego.
‘Es un honor ser policía’.
