Estas acciones incluyen campañas educativas en instituciones, participación en medios de comunicación y reuniones con padres de familia y docentes, con el propósito de fomentar entornos seguros para los niños, niñas y adolescentes.

Como parte de estas estrategias, se implementa el Plan Colegio, que consiste en el acompañamiento y la realización de rondas policiales en los alrededores de los planteles educativos durante los horarios de entrada y salida de los estudiantes, garantizando su protección. Asimismo, se promueve el Plan Padrino Escolar, una iniciativa dirigida a docentes, padres de familia y estudiantes, mediante la cual se desarrollan campañas y capacitaciones enfocadas en la seguridad y el bienestar de la comunidad educativa.

La Policía Nacional hace un llamado especial a los padres de familia para que no permitan que sus hijos conduzcan motocicletas sin la documentación requerida ni sin los elementos de protección exigidos por el Código Nacional de Tránsito. Es fundamental que los menores siempre se desplacen en compañía de un adulto responsable, con el fin de prevenir accidentes y evitar que sean blanco de actores delincuenciales. La seguridad de la niñez es una responsabilidad de todos, y la Policía Nacional reafirma su compromiso de seguir trabajando para garantizar entornos seguros para la comunidad estudiantil.