Distrito Capital, Bogotá
Miércoles, 19 de Septiembre de 2018
En 2016 la Institución dio un importante salto tecnológico en materia documental al instituir la firma electrónica.
  • En 2016 la Institución dio un importante salto tecnológico en materia documental al instituir la firma electrónica

¿Sabías que la producción de papel es un factor altamente contaminante?

Si bien es cierto, no todo el papel tiene el mismo impacto ambiental, pues los procesos de elaboración y su ciclo de vida son variables, per se la producción de papel es sinónimo de contaminación.

La industria papelera tiene un alto grado de responsabilidad en la contaminación del planeta, pues la obtención de celulosa comienza con la plantación de especies foráneas que en muchos casos alteran el ecosistema y la biodiversidad, y generan un factor degradante del ambiente, toda vez que para su cuidado, mantenimiento y producción de materia prima se recurre a herbicidas, tala de bosques y vertimientos de miles de químicos a las fuentes hídricas.

Partamos del hecho que para el blanqueamiento de la celulosa se emplea el uso de una mezcla de hidróxido, carbonato, sulfato y sulfuro de sodio que disuelve la lignina (sustancia natural que forma parte de las células vegetales, la cual da dureza y resistencia a las fibras).

No obstante, y con la jurisprudencia que en materia del cuidado ambiental se ha desarrollado en Colombia, hoy en día se obtiene papel a través de métodos más amigables con el planeta, como es la utilización de residuos de caña de azúcar como materia prima, la utilización mayoritaria de papel reciclado y el blanqueamiento con la utilización de químicos libres de hipoclorito de sodio; sin embargo, no deja de ser un elemento contaminante.

Como dato referencial, podemos decir que tan solo en el año 2016 la Policía Nacional tuvo un consumo aproximado a las 11.781 resmas de papel, lo que representó un valor cercano a los 151 millones de pesos; sin embargo, la pregunta es ¿Cuánto de este material fue a parar a las canecas de basura?; el esfuerzo en materia de tecnología realizado por la Institución permitió que a partir del 2014 entrara en vigencia el Gestor de Contenidos Policiales GECOP, consecuente con la política gubernamental de buenas prácticas administrativas y cero papel, como respuesta a la problemática de consumo desmedido y a la falta de lugares apropiados destinados a la custodia del acervo documental; máxime cuando la Policía carece de memoria histórica asociada a la falta de conocimiento y mala administración que culminó con la destrucción de miles de registros impresos por la falta de interés frente al caso en comento.

A principios de 2016 nuestra Institución dio un gran salto tecnológico en materia documental al instituir y poner en marcha la firma electrónica para todos y cada uno de los funcionarios de planta de la Policía; la herramienta fue concebida con el fin de contribuir a la eficiencia, eficacia y efectividad en las comunicaciones oficiales, y se muestra como pionera en esta práctica, que por demás, cuenta con la certificación del Organismo Nacional de Acreditación en Colombia ONAC y está catalogado como uno de los proyectos innovadores más eficientes para contrarrestar el consumo desmedido de material impreso.

El GECOP fue creado como una herramienta que permite consultar documentos en lapsos de tiempo más cortos y evidenciar, entre otras cosas, la trazabilidad, custodia y destinación final de los miles de registros que a diario ingresan a este sistema, reemplazando paulatinamente el obtuso método de consulta en el material impreso; asimismo, ha permitido ahorrar espacio en el almacenamiento de información que en otros tiempos requería de la destinación de sitios adecuados con estantería y condiciones ambientales para el bodegaje del papel.

El camino ha sido lento y hoy en día seguimos requiriendo del material impreso, nuestras picadoras se siguen llenando día tras día, y los anaqueles siguen conteniendo miles de hojas; pero la dinámica institucional sumada a la toma de conciencia, permitirán que las futuras generaciones vean el papel como un lujo innecesario que hará parte del pasado.