Impuestas 1.443 multas por comportamientos contrarios a la convivencia

Durante el 2018, la aplicación de Ley 1801, por la cual se expide el Código Nacional de Policía y Convivencia, arrojó en el territorio insular, 2.371 medidas correctivas, de ellas, 1443 se tradujeron en multas generales por comportamientos contrarios a la convivencia entre los residentes y visitantes al territorio insular. La Policía Nacional en el despliegue del proceso de Modernización y Transformación Institucional (MTI), sigue adelantando actividades pedagógicas con el fin de buscar la apropiación y reconocimiento del Código.

Entre los 10 comportamientos o incumplimientos a los deberes específicos de convivencia más reiterativos por parte de los ciudadanos en el departamento archipiélago, durante el año anterior, se encuentran: el irrespetar a las autoridades con 256 casos; portar armas o elementos cortopunzantes 132 comparendos realizados; incumplir, desacatar, impedir la función o la orden de policía 120 casos; sonidos o ruidos por reuniones o eventos 79 comparemos; realizar necesidades fisiológicas en vía pública 76 infractores; impedir o resistirse a procedimiento de identificación 55 casos y desarrollar la actividad económica sin cumplir los requisitos establecidos, 26 casos.

La aplicación de multas frente a comportamientos que ponen en riesgo la vida e integridad de las personas, permitió una disminución del registro del número de lesionados producto de riñas en un 18% en el año que terminó.

La aplicación del Decreto Presidencial 1844 desde su entrada en vigencia hasta la fecha, ha permitido la incautación de 188 dosis, representadas en 146 gr de marihuana, 27gr derivados de la cocaína y 15gr de bazuco. Así mismo, la Policía Nacional en compañía de veedores ciudadanos y los entes de control del departamento han realizado dos procesos de destrucciones de la sustancia incautas en los últimos tres meses.

El coronel Jorge Antonio Urquijo Sandoval, comandante del Departamento de Policía San Andrés, Providencia y Santa Catalina, invitó a la ciudadanía a evitar comportamientos que afectan las buenas relaciones entre los habitantes del territorio insular, “las conductas descritas como contrarias en la Ley 1801 son un instrumento que debemos acatar para mejorar la convivencia y para demostrar nuestro civismo ante los cientos de visitantes que llegan a diario a las islas”