País
Martes, 06 de Agosto de 2019
Con esta herramienta de política pública se busca reducir de manera sostenida la siniestralidad vial.

Planes municipales de seguridad vial para motociclistas serán claves para reducir la siniestralidad en Colombia

La Dirección de Tránsito y Transporte junto con la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) acompañarán a las entidades territoriales en el desarrollo de los Planes Municipales de Seguridad Vial para motociclistas que serán fundamentales para reducir la siniestralidad, de hecho, ya se han llevado a cabo cinco talleres en Bogotá, Cali, Bucaramanga, Barranquilla y Medellín.

El Observatorio Nacional de Seguridad Vial reportó en el primer semestre del año 1.549 motociclistas fallecidos; hechos los análisis de la siniestralidad se ha podido determinar que el 16.9 % de los usuarios de moto fallecidos corresponden a la figura de acompañantes (263), así mismo, se identificó que el 56 % de los acompañantes fallecidos eran mujeres. Respecto a los lesionados, la participación de las mujeres es mucho mayor. En lo corrido de 2019, de los 1.959 acompañantes de motociclista lesionados entre enero y junio, el 72% eran de sexo femenino. Por otra parte, el 16% de los acompañantes fallecidos eran menores de edad.

7 conductas que salvan vidas

Si bien es cierto que el conductor de la motocicleta es  en gran parte el responsable de la seguridad del acompañante es necesario entender que un acompañante incide en la aceleración, el manejo, la distancia de frenado y los sistemas de suspensión de la motocicleta. En virtud de tal referencia, la ANSV ha identificado 7 conductas que aplicadas de manera correcta pueden salvar vidas:

  1. Casco y elementos de protección: El conductor y acompañante deben contar con el equipo de protección y seguridad necesario. La calidad de los elementos del acompañante debe ser igual a la del conductor.
  2. Uso permanente de los apoyapiés o estribos: Los estribos son elementos situados estratégicamente para que el acompañante ubique los pies y no se deben modificar o cambiar de lugar y mucho menos transitar sin ellos.
  3. Comunicación: Antes de iniciar el recorrido se puede consensuar con el acompañante algunos gestos para comunicarse, lo mejor son unos golpes en el hombro y algún gesto con la mano a la altura de los ojos del conductor.
  4. Posición: El conductor debe pedirle al acompañante que se siente lo más pegado al conductor que pueda. Esto para que en el momento de una frenada el acompañante no se desplace hacia adelante y golpee la espalda de conductor. Así mismo se evita que en el momento de presentarse una aceleración fuerte el acompañante se caiga hacia atrás. Se recomienda que el acompañante abrace al conductor por la cintura, pero nunca por los hombros o cuello. La posición de las piernas también es importante y siempre deben ir ejerciendo una leve presión al contorno del conductor.
  5. Evitar movimientos bruscos: Se debe pedir al acompañante que mientras la motocicleta esté en movimiento evite realizar movimientos bruscos ya que afecta la estabilidad de la motocicleta y complica las maniobras de conducción.
  6. Curvas: El acompañante debe seguir con su cuerpo el mismo movimiento del conductor, por ejemplo, si se inclina a la izquierda también se debe inclinar hacia la izquierda. Si no se hace así, se estará descompensando los pesos y se obligará al conductor a corregirlo y esto no es del todo sencillo.
  7. Concentración: Para que el acompañante siempre se mantenga atento a los movimientos del conductor, es importante que no se distraiga con dispositivos celulares o similares. Un buen acompañante es un copiloto que puede advertir riesgos en las vías de manera oportuna